Barcelona incorpora 31 autobuses de gas natural comprimido para contaminar menos
En pleno debate sobre la polución por la investigación de la Fiscalía de Medio Ambiente sobre la capital catalana y Madrid, TMB ha presentado los nuevos autobuses, que empezarán a circular en marzo, y que reducen las emisiones de óxido de nitrógeno y partículas, que están entre los principales contaminantes.
En una breve intervención, Pestaña ha destacado que este año el 100% de los autobuses de TMB serán 'vehículos mediambientalmente mejorados', bien sea por la incorporación de filtros en los diésel o su sustitución por los de gas natural, lo que contribuye a mejorar la calidad del aire.
Los nuevos autobuses circularán por las líneas 50 (Parc Montjuïc-Trinitat Nova) y 55 (Plaça Catalana-Parc Montjuïc), y con ellos empieza la renovación de un total de 80 --algunos articulados-- prevista para este año, cuando el 35% de la flota utilizará gas natural, porcentaje que la empresa quiere elevar hasta el 50% en 2015.
Con ello los motores de gas natural comprimido crecerán hasta las 500 unidades de las 1.080 de la flota, y suponen reducir en un 90% las emisiones de óxidos de nitrógeno, casi el 100% de partículas y el 20% de monóxido de carbono, y los gases de escape son casi inodoros, hacen poco ruido y no generan cenizas ni residuos sólidos.
En una breve intervención, Pestaña ha destacado que este año el 100% de los autobuses de TMB serán 'vehículos mediambientalmente mejorados', bien sea por la incorporación de filtros en los diésel o su sustitución por los de gas natural, lo que contribuye a mejorar la calidad del aire.
Los nuevos autobuses circularán por las líneas 50 (Parc Montjuïc-Trinitat Nova) y 55 (Plaça Catalana-Parc Montjuïc), y con ellos empieza la renovación de un total de 80 --algunos articulados-- prevista para este año, cuando el 35% de la flota utilizará gas natural, porcentaje que la empresa quiere elevar hasta el 50% en 2015.
Con ello los motores de gas natural comprimido crecerán hasta las 500 unidades de las 1.080 de la flota, y suponen reducir en un 90% las emisiones de óxidos de nitrógeno, casi el 100% de partículas y el 20% de monóxido de carbono, y los gases de escape son casi inodoros, hacen poco ruido y no generan cenizas ni residuos sólidos.
La incorporación de autobuses a gas natural empezó en 2001 con el convenio entre TMB y Gas Natural Fenosa, y los que ahora serán sustituidos llevan 14 años circulando por diversas líneas.
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